Fetiches «extraños»: Claustrofilia
Es común encontrar a personas que padecen Claustrofobia, miedo a los espacios cerrados o pequeños. Y la Claustrofilia es todo lo contrario, se trata de un fetiche por los lugares cerrados y pequeños en los que se sienten cómodos y dispuestos para realizar cualquier acto sexual que se les proponga y aunque no lo parezca, también es un fetiche muy común.
Si os paráis a pensar, seguramente habréis visto a muchas parejas practicando sexo en los baños de algún establecimiento y precisamente a quienes les gustan este tipo de prácticas es porque les gusta la Claustrofilia. Existen muchas variantes de lugares que encajan con este fetiche, pero este es el ejemplo más claro que he podido encontrar.
Principalmente, este fetiche no tiene nada de malo puesto que simplemente se trata de tener sexo en lugares protegidos de miradas ajenas y no tiene porque convertirse en una mala obsesión. Hasta la fecha no hay constancia de nadie que no pueda hacer el amor en otro lugar que no sea encerrado en un pequeño habitáculo.
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